La 7° edición de El Origen unirá Chile y Argentina en una aventura única. Salir de la zona de confort no es algo que ocurre todos los días. Es una tarea que requiere de un esfuerzo excepcional, de soñar más allá de los límites. Eso hizo TMX Team cuando decidió alejarse de la Patagonia para trasladarse a una zona montañosa completamente diferente a lo ya conocido, a lo que estaban acostumbrados. Trasladar su equipo, su logística y su energía muchos kilómetros para llegar hasta Portillo, en Chile, en medio de la Cordillera de los Andes, donde será la base de operaciones y también el Campamento para todos los corredores. Allí será la edición 2018 de El Origen, que promete ser una aventura que nadie podrá olvidar. Comenzará el jueves 1 de marzo y finalizará el sábado 3.
A dos horas de Santiago de Chile y apenas a 6 kilómetros del Paso de los Libertadores, la frontera con Argentina, la zona de Portillo, a orillas de la Laguna del Inca, fue el primer centro de ski de América del Sur, cuando comenzó la construcción del Tren Trasandino, por donde transcurrirá parte de la carrera, recorriendo sus viejas vías por caminos inhóspitos que solo El Origen permitirá conocer. Este resort de montaña, en la región de Valparaíso y a 2.680 metros sobre el nivel del mar, será base de operaciones y campamento, a donde regresarán todos los corredores al finalizar cada una de las tres etapas.
Para esta edición, además de las clásicas modalidades de 100k y 50k, se sumó la de 30k, que permite a los nuevos aventureros animarse a los desafíos de a poco, probando distancias y altimetrías menos ásperas, en una zona en la que se encontrarán con un terreno más bien árido, pedregoso, atravesando ríos, valles, filos, mallines, senderos de mulas, puentes y las vías de ferrocarril, para lo que se le pidió a los corredores que lleven una linterna frontal. No le faltará nada a esta travesía andina.
El imponente Cerro Aconcagua, con sus 6.962 metros, será testigo del paso de los participantes, que visitarán cada uno de los lugares más icónicos de la zona. Los corredores de 100 kilómetros largarán el primer día con la pared norte hacia el frente, para visitar en la jornada inicial el Parque Aconcagua, el Puente El Durazno en la zona de Horcones, el Puente del Inca, la Quebrada de Vargas, el cementerio de los Andinistas, el Refugio Grajales, el Cerro Penitentes para alcanzar los 3.650 msnm pasando el kilómetro 20 de un día de casi 37k.
Los dos días siguientes, la llegada será en el Hotel Portillo, pero con diferentes largadas. La etapa 2 se iniciará en Las Cuevas, del lado argentino, recorriendo un sendero que será un atajo a los famosos caracoles que conforman la ruta fronteriza. Por un filo se llegará al Cristo Redentor, llegando a la altura máxima de 4.006 aproximadamente en el kilómetro 5; para de allí llegar hasta el portezuelo del Bermejo donde conectarán con las vías del ferrocarril, aquel que unía Los Andes con Mendoza y dejó de funcionar definitivamente en 1984. Esa obra de infraestructura que cruza por entre medio de las montañas será utilizada por primera vez como ruta para los corredores. Antes de arribar a la meta, se desviarán hasta el Refugio Plateau por un camino de curvas y contracurvas.
El tercer día también tendrá lugares espectaculares para descubrir. Largando desde la vieja estación del tren, por donde se tomará un camino siempre de un lado y del otro del Río Juncal, hasta la llegada al Parque Andino Juncal y su refugio, un área protegida privada compuesta por glaciares, humedales, esteros y una gran variedad de flora y fauna muy particular, declarado en 2010 como sitio Ramsar, el primero y único en los Andes Centrales, por la conservación de la biodiversidad de su humedal. Tras el paso del refugio Mil Estrellas, una ruina de piedra sin cubierta desde donde pueden apreciar los cerros del Glaciar Juncal, se comienza el regreso, para cerrar esta travesía de tres días y mil paisajes que serán difíciles de olvidar.
Los corredores de 50k y 30k modificarán los senderos y las largadas para adecuarlos a la cantidad de kilómetros elegidos.
Esta 7° edición fue pensada y diseñada para que los corredores pudieran disfrutar de un lugar único, que por tratarse de un centro de ski se encuentra en temporada baja, por lo que en los senderos y caminos solo encontrarán caminantes y andinistas. Los inscriptos pudieron elegir varias modalidades de alojamiento: el hotel, el Inca Lodge, el Octógono y el diferentes opciones para acampar. Las comidas serán dentro de las instalaciones del hotel, al igual que las charlas técnicas. También entre correr de manera individual o en parejas.
En cada una de sus ediciones, tanto en Villa Traful como en Villa La Angostura, El Origen se caracterizó por ser una carrera fraternal, en donde los campamentos se vuelven un lugar de encuentro, de charlas, de compartir momentos con otros corredores. Se arman grupos, se conoce gente, se comparten experiencias, se disfruta desde la largada hasta la llegada, creando lazos de esos que -al nacer en plena montaña- no se disuelven con el tiempo. Los traslados, las comidas, los mates después de cada llegada, los recorridos, todo tiene un hilo conductor, que es el de vivir una experiencia que no sólo se trate de correr, sino de compartir. De eso se trata también esta nueva edición de El Origen.