Sergio Ñiripil, promesa para el deporte paralímpico. El pasado sábado 22 de abril, en la segunda edición de la Corrida Vertical – Semana del Glaucoma, tuvimos la oportunidad de conocer a Sergio Ñiripil, atleta de solo 13 años que pese a su ceguera completó perfectamente el recorrido de 61 pisos para llegar a la cúpula del Sky Costanera.
Cuando Sergio tenía un año fue sometido a una operación de cataratas que derivó en glaucoma. Desde ahí comenzó a perder la vista. Tuvo cuatro operaciones. En la última cirugía, esta falló y perdió totalmente la visión. Esto fue el año 2011.
Según su padre, también de nombre Sergio, él ha asumido con naturalidad estos cambios, mejor que un adulto. «Porque piensa que sería peor no poder caminar o usar sus piernas. No es un tema relevante para él. Lleva tres meses entrenando».
Su entrenador, Alfonso Ramírez, dice que tiene muchas condiciones. «Está motivado. Es muy bueno. Lo evaluamos y vimos que tiene proyecciones. Quiere ser un deportista profesional», explica.
Para Sergio sus estudios también son importantes. Asiste a un colegio regular y quiere estudiar leyes. Para estudiar se busca la materia en braile. Se le dicta o se escanea. Trabaja con el computador. Eso lo ayuda mucho.
Su familia lo apoya en sus objetivos deportivos y escolares. Su hermano, Isaías, de 25 años es su guía para correr. «El tema de los guías para las personas que no ven y otras discapacidades es un tema complejo. Nadie quiere ser guía porque sienten que anulan sus opciones deportivas. Hay que apelar a la generosidad de los deportistas para conseguir guías. Isaías estudia kinesiología en Valparaíso. Apoya a su hermano. Se pasaron el verano entrenando», explica Sergio padre.
Tanto su entrenador y su familia no dudan en que Sergio pronto estará defendiendo los colores de Chile en torneos internacionales. Por su disciplina y motivación saben que lo logrará.